La Hacienda de Navarra ha presupuesto 470 millones de aportación al Estado español, lo que supone 45 millones de euros menos que el año pasado, fijado en 515,6. Esta cantidad se sitúa en un “término medio” dentro de la horquilla que maneja el departamento de Hacienda y Política Financiera. Mikel Aranburu ha indicado que la cifra es una “previsión prudente” de lo que puede terminar siendo la aportación.

En la comparecencia ofrecida por Mikel Aranburu el 11 de octubre, quedó de manifiesto que la negociación del año base con la Administración central se disputará en dos márgenes: uno más beneficioso para Navarra, que rondaría los 341 millones de euros de aportación, y otro que supondría un mayor esfuerzo para la Comunidad Foral, al tener que desembolsar 494 millones de euros.

La no renegociación del quinquenio 2010-2014 en 2015 debido a la interinidad del Gobierno español y al cambio de Gobierno en Navarra obligó a activar la prórroga automática de la aportación que ascendió a los 590 millones de euros.

Respecto a la reforma fiscal que el Gobierno de Navarra aprobó en 2015 no se verá modificada en 2017, al menos en las “líneas fundamentales” del texto, que tendrá plena aplicación a partir de enero de 2017. Tal y como manifestó Aranburu los tramos del Impuesto de Sociedades y el Impuesto sobre el Patrimonio no entrarán en funcionamiento hasta el 1 de enero del año próximo.

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