Las delegaciones del PNV y PSE están negociando los cambios tributarios que quieren aprobar antes de finalizar el año. En el caso de que las modificaciones no se aprobasen en los próximos días, sería posible realizar estos cambios durante el primer trimestre de 2018 con carácter retroactivo al 1 de enero.

Si las modificaciones se aprobasen durante los primeros meses de 2018 había margen para presentar el proyecto en las Juntas Generales de los tres Territorios Históricos. En el caso de Araba, este escenario propiciaría la negociación con otro partido, previsiblemente el PP, para su aprobación antes del 31 de diciembre de 2017.

En las negociaciones entre ambas formaciones, PNV y PSE, se está analizando varias cuestiones, siendo la principal el Impuesto de Sociedades. El PNV quiere una rebaja del tipo nominal para este impuesto, sin que ello suponga una merma para la recaudación. El PSE ha mostrado su descontento con este hecho, pero barajan una formula que permita compensar la baja del impuesto con la eliminación de varias deducciones.

Las grandes empresas son quienes más se benefician de las bonificaciones fiscales del Impuesto de Sociedades y a pesar de que el tipo se encuentra fijado en el 28%, pagan menos. El PNV ha apostado por bajar el porcentaje nominal que grava los beneficios empresariales hasta el 25%, a cambio de ser más exigentes en las deducciones, manteniendo únicamente las que contribuyan a generan empleo y a la incentivación de la innovación.

De aprobarse estos cambios fiscales, bajaría la presión para las pequeñas y medianas empresas, mientras que las grandes empresas, que son quienes declaran mayores beneficios, perderían alguna de las bonificaciones y equilibrarían el balance final, y en el mejor de los casos permitirían aumentar la recaudación de las Haciendas Forales.

Fuentes:

Fuente 1

Fuente 2

Fuente 3